El otoño ha traido
un silencio que escucha mis besos
y ha tirado del hilo
desnudo que hilvana mi ser
ha escupido en mis ojos
azogue para que me quieras
Y ha dejado mi cuerpo
vestido de manchas de fe.
No ha querido quedarse
a mirar lo que queda del día
y ha apostado que cuando
se vaya yo aún estaré.
No hay comentarios:
Publicar un comentario